Carta para el 2020
Querido 2020:
Es nuestro último mes juntos y quiero decirte que me he cuestionado muchas cosas, he hecho cuentas y balances y he llegado a conclusiones sobre lo que sucedió contigo y conmigo.
2020, sí que aprendí de ti y de todas las adversidades que me presentaste; quiero que sepas, que aquí estoy aceptando todo lo que ha sucedido y que no me quedo con la queja, me quedo con los aprendizajes. Me vi a mi misma luchando internamente, enojada por la situación, frustrada por las limitaciones, con un miedo profundo a perder, perder en todo sentido... Hoy después de muchas lunas estoy en paz y agradecimiento...
Hoy me quiero despedir de mí “Vieja yo”, esa que se va a ir contigo. Los últimos 365 días me han transformado y hoy tengo claro, que quiero luchar, sobreponerme, aprender, soñar y vivir al máximo; valorar aún más a mis seres queridos, amar sin límites, emprender mi vuelo y estar abierta a lo que la vida tenga para ofrecerme.
Hoy después de muchas luchas internas no tengo miedo, porque sé lo que quiero y sé también que tengo las herramientas para conseguirlo. Ahora me siento una mujer mucho más segura de mi misma, he entendido de lo que soy capaz; y a donde puedo llegar.
Te agradezco todo lo que me enseñaste, la importancia de la resiliencia, de vivir en el presente, el sentido de la empatía, comprender realmente el verdadero valor de la familia y la salud… No hay nada que me haga más feliz hoy, que poder compartir con ellos y ver las sonrisas en sus rostros. Recordé la grandeza de lo simple, las trasnochadas viendo Netflix todos juntos, gracias por las deliciosas recetas que aprendí a hacer, ahora soy toda una cocinera… Me diste sin duda la oportunidad de ver y reconocer a los que tengo cerca, pero más que todo, te agradezco porque me encontré conmigo misma.
Gracias por el crecimiento de la empresa familiar; porque juntos pudimos vencer todas las adversidades, nos dimos cuenta de que juntos somos más y disfrutamos el proceso al máximo. ¡Gracias por sacarnos de nuestra zona de confort, sacudirnos y ayudarnos a ver que podemos ser más creativos de los que nunca imaginamos y como resultado hoy nuestra empresa está mejor que nunca! ¡Gracias!
Gracias por hacernos más fuertes. Te recordaré por hacernos entender cuanto podemos crecer en medio de las dificultades, gracias por exigirnos vivir al límite.
Con todo el amor quiero dejarte atrás 2020 y para esto, aparte de mi gratitud infinita, también tengo que perdonarme… Perdonarme por las veces que sentí que en este proceso me fallé a mí misma, por todas las veces que dudé y perdí la confianza. Por no verme con amor frente al espejo, por las decisiones que pienso que fueron equivocadas, por haber estado distraída y haberme descuidado, por no haber sido tolerante conmigo misma y con los que amo, por sentirme gris y desesperanzada algunos días... Perdonarme por todas esas cosas que muy dentro de mí sé, que pude haber hecho mejor y no hice...
Adiós 2020, gracias por tu legado, por ser contundente, por sacudirnos como individuos y como humanidad, por los aprendizajes extremos, por las lágrimas y la risa, por los kilos de más, por la comodidad de la pijama, y las reuniones por Zoom, por la resiliencia a que nos vimos obligados y el entendimiento del poder de un abrazo en medio del distanciamiento social, gracias por los cielos azules, el agua cristalina y el canto de pájaros... Nos mostraste con claridad lo relevante, lo esencial, nos despojaste de la banalidad de lo material. Ahora entiendo que estas son cosas que no se aprenden en el equilibrio, se aprenden cuando la vida nos arrincona. Gracias por ser el vehículo a través del cual llegaron todas estas vivencias, fuiste el camino del tiempo que nos permitió volver de nuevo al hogar...
¡Gracias 2020, estoy viva! hoy sé que tengo 2020 cosas por agradecer! Fuiste un regalo!
#YoSoyJuanaCanela
#GratitudInfinita